15 de abril de 2007

Flor de una noche...

Recuerdo la letra de esta canción que dice: "jamás duró una flor dos primaveras...”
Es cierto; nadie ha podido conservar mucho tiempo una flor, a no ser que la haya secado a propósito o la haya guardado entre las páginas de algún libro…

Hace pocos días un buen amigo me habló de la existencia de una flor que dura sólo una noche; no conozco su nombre, ni su aroma, tan sólo la apariencia que podeis ver en la fotografía…
Cuando pienso en esta flor me cuesta imaginar algo así, al igual que en otros casos sé que hay especies que lleva años el hecho de poder disfrutar de su floración…
La naturaleza ofrece regalos insospechados, muchas veces desconocidos y difícilmente abarcables, a pesar de toda nuestra sapiencia e imaginación…

Sucede que mientras vivimos ocurren cosas tan efímeras como la corta existencia de una flor, la visión de una estrella fugaz o la emoción de un sólo beso…
Cosas tan breves que sólo nos podemos permitir disfrutar un momento; esta flor de un día florece y nos muestra toda la intensidad de su singular belleza para después, poco a poco, aparecer mustia y apagada tras haber cumplido su corta misión…
Quizás todo un símbolo, que apenas percibimos, del sentido efímero de nuestra existencia…

Pensamos que nuestra vida va a ser larga, amplia, extensa y completa; pero cuando apenas hemos empezado a saborear su aroma embriagador, ya casi empieza a apagarse, sin que podamos hacer nada por remediarlo.
Lo más importante es que esta flor de un día, se muestra radiante, llena de blanca intensidad, despreocupada del tiempo que dura, cumpliendo su cometido y entregando todo lo mejor de ella sin medida…

Es difícil que nosotros nos sintamos como flor de un día, muy difícil.
Tal vez si comprendiéramos que nuestra vida, en comparación con el tiempo, es tan fugaz y efímera como esta flor, seríamos capaces también de dar cada día lo mejor de nosotros mismos…

13 comentarios:

thoti dijo...

.. es curioso porque las flores mas hermosas son, están y vale.. no son bellas para que las alaguen, ni exigen ser vistas, ni reclaman sus derechos, ni nos piden nada a cambio, están ahí y ya.. pero no se inquietan por ser o no descubiertas, ni admiradas.. sin embargo siempre dejan su aroma y belleza al que tiene la suerte de descubrilas.. cumplen una hermosa misión y no se preocupan, por el día de mañana.. menuda profunda lección que nos dan esas flores de un dia, Isabel.. ..un besito, de por lo menos, dos :-)..

JuanMa dijo...

No se trata de cuánto duremos, sino de qué hagamos con nuestro tiempo.

Un beso.

Candelas Sanchez Hormigos dijo...

Todo es cuestión de tiempo, de la medida que usamos los humanos, niños caprichosos de esta creación.

Tal vez para la flor, con su medida, sean años de florecimiento; para la estrella fugaz años luz hasta morir en nuestra atmósfera.

Nuestra medida, nuestro cronometro no puede medir todo.

Un beso

Anónimo dijo...

Pero a pesar del tiempo efímero, una FLOR.

Hanna dijo...

Medida rara, pero segun el referencial escogido, está más que cierto.
Besitos

Fugaz dijo...

Disfrutemos de la vida pues, que son dos días y tres cafés.

Besazo Isabel

S

Unknown dijo...

Nadie mejor que nosotros mismos para saber como cuidarnos, como fertilizarnos y como mantenernos en flor siempre.
Besos!

Gwynette dijo...

Esta es la "Da Quynh" o la Reina de la Noche o también llamada Galan de noche.(Reina por un día) :-)

Me has tocado un tema que estos días me tiene muy conturbada. Acaba de morir un amigo mio de forma bastante
extraña, su familia dice una cosa, y los amigos hacemos otras conjeturas..pero este sentimiento de lo efímero, tristemente ahora lo tengo muy presente...

Abracitos de alcachofa

El búho rojo dijo...

Tiempo... de nuevo otra vez el dios Cronos...

El tiempo es sólo el envase de la vida... no significa que el que sea muy grande, sea de más calidad...

Un beso

Isabel dijo...

Thoti,en realidad,hay tantas cosas diarias que nos dan lecciones que me temo que no seamos demasiado buenos alumnos,amigo.Un besote..

Juanma,es verdad,calidad y no cantidad es en lo que deberíamos centrarnos..Un beso.


Candela,no es cuestión de medidas ,sino de saber sacarle el máximo partido a lo que tenemos...
Sea mucho o poco que sea bueno. :-)

Alberto,una flor que siempre nos ofrece belleza y alegra nuestros sentidos...Otra para ti... :-)

Hanna,gracias por pasar por aqui y dejar tu comentario,pero sobre todo por seguir teniendo la paciencia de leerme... :-)

Fugaz,algunos no tienen tiempo ni para ese café,amiga.. ;-)No saben lo que se pierden con tanta prisa...

Angel,es tan cierto lo que dices que parece mentira que podamos olvidarlo;con todo lo bueno que eso significa...Un beso.


Gwynette,siento la pérdida de tu amigo,porque yo los valoro muchisimo,además si ocurre en circunstancias difíciles de asumir pues más doloroso aún para asimilarlo;en estos casos uno se replantea qué es lo que podemos estar haciendo mal y qué convendría cambiar en nuestras vidas...
Por desgracia tenemos que escarmentar en carne propia para convencernos muchas veces...Te agradezco que me des el nombre de tan singular flor,porque era desconocido para mi...
Un abrazo muy sentido y espero que te recuperes poco a poco...

Pablo,así es,lo que podamos hacer con el tiempo que nos otorgan es responsabilidad nuestra, el hecho de emplearlo en cosas que nos merezcan la pena siempre es positivo,porque no tenemos muchas oportunidades...Un abrazo.

poca luz dijo...

"...cómo si fuera esta noche la última vez", cantaba alguien.
Y ciertamente, vivir de esa manera apasionada me parece una forma de demostrar que sabemos que lo efímero de todo esto tiene una relación directa con la profundidad de nuestras relaciones.

....y ahora se que tu tienes relación directa (o sea, toda la culpa) de que a mí se me haya pegado esta cancioncita.

...besazo!

Isabel dijo...

Vale,Bea...;te besaré esta noche como si fuera la penúltima vez...jaja;no digamos la última,amiga...
Pero la intensidad y calidad de nuestras relaciones es mucho más importante que la cantidad,de eso estoy segura...Un gran abrazo.

Lorena dijo...

Me quedo con lo último...hay que intentar dar cada día lo mejor de nosotros mismos. Somos frágiles y fugaces...pero la vida es intensa y mágica. Hay que disfrutarla. Mil besazos!