1 de abril de 2008

Ruinas

Hay veces que las personas son como ruinas, sólo les sustenta la fachada; cuando traspasas el umbral sientes que no hay nada, sientes frío por todas partes.
Si permaneces demasiado tiempo expuesto a ellos incluso comienzas a sentirte helado.

Es tan fácil imaginarlo como intentar pasar una noche en una casa sin techo; cuando el frío arrecia no hay nada más desalentador que no sentirnos a cobijo.

En algunas ocasiones he tenido esa sensación; existen personas que, suceda lo que suceda, nada parece afectarles; no sienten ni frío, ni calor, no demuestran ninguna sensibilidad, ni apenas algún signo de ternura bajo sus corazas.

Parecen tener miedo a sentirse humanos, a demostrar sus sentimientos abiertamente, como si la “sensiblería” no estuviera hecha para ellos.

Van de duros e indiferentes por la vida y eso me provoca desazón.

Creo que, simplemente, se trata de cobardía, de un miedo atroz a ser heridos o vulnerables.

Confieso que, personalmente, nada me provoca más miedo que sentirme indiferente ante los que me rodean.

El miedo a sentir, el miedo a demostrar los sentimientos, simplemente, convierte a las personas en espectrales seres, como lacónicas ruinas que acaban rodeadas de una densa y fría capa de niebla, sin ninguna posibilidad de que les lleguen la luz ni el calor.


12 comentarios:

MªValle dijo...

"El miedo a sentir, el miedo a demostrar los sentimientos",...

No es miedo a sentir. Sentir, SIENTEN, es miedo a demostrar los sentimientos, que es distinto y es tras lo que muchas personas se esconden, por ese miedo precisamente, a ser heridas, porque seguramente han sido heridas muchas veces y piensan y creen sinceramente, que no mostrando sus sentimientos se evitan sufrimientos, aunque no sea cierto y la procesión vaya por dentro.
O porque muchas veces los han demostrado y han sido objeto de burlas. O sencillamente les cuesta trabajo, como a mí...
Un beso, amiga, te sigo leyendo, no tengas dudas.

José Luis dijo...

Lo que no hay que hacer es camuflarse entre ellos. Destaquemos nuestros sentimientos.

Siento no leerte más a menudo pero no tengo tiempo ni pa toser.

Un abrazo.

Nobska dijo...

Hay de todo en este mundo, y desafortunadamente nos tropezamos con este tipo de personas que tu bien describes muy pero muy a menudo. Te dejo un caluroso abrazo para espantar aquellos helados.

dijo...

Existen esas personas, aveces las escucho o las veo y no las entiendo. Creo que vivien en una nube vaya a saber de que.
Y pienso, cómo hacer para vivir sin demostrar? demostrar lo que sentimos, lo que queremos, lo que buscamos, lo que detestamos... y no lo entiendo... están más fríos que un glaciar, por suerte existen otras personas, como vos, que viven demostrando y dando...
un abrazo

Meiga en Alaska dijo...

Yo creo que la gran mayoría de esas personas son así por diversos motivos y es importante ser capaz de entenderlos ants de juzgarlos. Claro que es difícil entenderlos porque no se abren fácilmente y suele ser que no se abren porque cuando lo han hecho les han herido duramente.

Es difícil superar ciertas heridas que nos marcan de niños, y nos dejan huella para el resto de la vida. Y a veces tiene más sentido protegerse que exponerse y arriesgarse de nuevo a ser heridos.

Cada uno elige vivir como mejor puede. Y evidentemente cada uno elige relacionarse con quien prefiere :)

Besos de comienzo de deshielo

LlunA dijo...

Pues que triste sentir sin sentir...a mi me gusta sentir... y exteriorizar lo que siento!!Eso es vida, eso es vivir!
Un besote

Manolo Merino dijo...

Con la perspectiva justa, en cualquier ruina se puede ver el esplendor que otrora pudo haber ostentado y por yerma y sobrecogedora que parezca, bastará un paseo por su interior para descubrir la vida que seguro aún alberga.
Sería cuestión de dedicar una mirada atenta a su alrededor para localizar los sillares sobre los que se levantaba y con ganas, esfuerzo y ayuda, seguro que cualquier ruina puede ser reconstruida.

xxxoo.

almena dijo...

Como tú dices, es muy posible que sólo sea una coraza tras la que se protegen de sus propios miedos...

Besos, bella

Anónimo dijo...

Miedo he sentido al descubrir tanta verdad en esas palabras.
Un saludo.

Hanna dijo...

Miedo, indiferencia, cobardía de vivir, heridas no sanadas, una mezcla bombastica.
Ni todo lo quedo parece es, ni todo lo que es parece.
Que hay personas vacías, que son icebergs humanos, hay, ahora el porque? Solo ellas sabrán, pero cuando lo saben ya no son tan vacías.
Paradojo...
Quizás.

Besitos

El búho rojo dijo...

Es posible que haya gente que no sepa vivir y lo haga de acuerdo con un supuesto manual...

Estoy completamente de acuerdo contigo y me imagino que todos hemos tenido esa sensación...

Pero recuerda que simpre hay quienes te hacen vibrar,

Un beso

Anónimo dijo...

vaya pues sí, creo que protegerse es un acto reflejo ante cualquier posible herida o decepción, aún con todo, como dice buho rojo,siempre hay quien te hace vibrar, e incluso, los pacientes e insistentes pueden derribar los muros más elevados cuando hay una fuerza suprema que les empuja a conocerte mejor.