8 de junio de 2008

Clones

Como cada mañana, las mismas miradas perdidas, sin un objetivo concreto; miran, tras la ventana del autobús, del metro o su vehículo, la misma desgana en los rostros de los que se cruzan hacia sus centros de trabajo.

Van absortos pensando en sus pequeños fragmentos de vida; como retazos del pasado y del futuro que se mueven, mente a mente, a la velocidad de la luz del día.
Una corriente invisible se desliza y los conecta, un campo magnético los atrapa y ralentiza; es ese instante en el que, como esclavos, marchan forzados a sus campos de trabajo.

La sangre comienza, poco a poco, a correr por sus venas, la adrenalina comienza a hacer su efecto, arrastra el estrés y el malhumor con ella; hasta que, como una gota de agua que se disuelve en el océano, la rutina acaba por someterlos y convertirlos nuevamente en autómatas de otro lunes de desidia.
Son los clones de un nuevo día.

Imagen: Malexa-krost

Siglo XXI - V.S. Unión

15 comentarios:

Anónimo dijo...

Pocas cosas más tristes, o más desesperanzadas que un transporte público un lunes por la mañana... La tristeza o la apatía, o la desesperanza, tienen un rostro tan parecido, que cuando se cuelga en la cara de individuos aparentemente diferentes, los uniformiza, los hace uno solo...
Feliz domingo, para que conjures el lunes...

dijo...

clones del nuevo día... días que se repiten, conductas que pasan a ser cotidianas, perderse en esta humanidad tan poco humana.
mil besos

Manuela Fernández dijo...

El caso es que nadie se siente clon, sino todo lo más aburrido.

Anca Balaj dijo...

Ahí está la verdadera valentía, no se trata de comerse el mundo, sino de que el mundo no se te coma a ti.

Ahora se me han quitado las ganas de que venga el lunes. Bueno, tampoco tenía muchas.

Un beso, Isabel, tu blog gana día a día.

Ligia dijo...

Uff, me recuerdas que mañana es lunes. Hay que intentar que la rutina no se apodere de nosotros como sea para no convertirnos en clones.Un beso

LlunA dijo...

Ahora voy en moto al trabajo...y me gusta. Me gusta imaginar la vida del resto de personas que conducen y a las que me voy cruzando...así cada día es diferente y la rutina deja de ser rutina!

A por otro lunes!! ;)

38 grados dijo...

por eso no me gusta la oveja dolly....me rebelo por mi individualidad, mi unicidad y si me tengo que inventar doscientas maneras diferentes para llegar al trabajo, me las invento.
O eso intento.
Muak

Emig dijo...

Además del propio artículo, me quedo con el comentario de lluna "A por otro lunes!!" Este tema me ha recordado un artículo que leí en un periódico local, que habla a modo de metáfora de un lugar llamado Rutilandia. La rutina hace que todo parezca, cuando, en realidad, si cada instante es nuevo, no debiera parecerse nada a nada... a veces intento que así sea. Observo a la naturaleza y, aunque un árbol esté "siempre igual" creo que lleva su propio ritmo natural. Nosotros, ¿llevamos ritmos naturales? Creo que cada vez menos, a pesar de tener tanta tecnología a nuestras espaldas y servicio.
Me ha gustado este artículo. Hablar de clones es hablar de algo que no deberia existir, pero ahí está. A veces pienso que para salir de ese estado hay que verse y sentirse a uno mismo, pues ahí anida lo que al árbol le da la entereza de estar siempre ahí, pero vivo.
Un abrazo

zel dijo...

Inquietante post, me suena a conocido pero a indeseable...

Anónimo dijo...

para escapar a la masa hay que encerrarse en unos auriculares o en una oración

Gwynette dijo...

O leer.
..y hay otra cosa tremenda en los transportes públicos a primera hora de la mañana: los olores -los malos-, es que salí fina de olfato, como mi madre...:-)

Besitos

Inuit dijo...

Viajo poco, pero últimamente me toca ir en tren y metro los viernes por la tarde;te puedes creer que las primeras veces me entraba una angustia que solamente aliviaba con lágrimas.
Tanta gente que no se miran, como autómatas ,tanta indiferencia y soledad, tanto extraño humano como uno mismo,deprime.Tengo claro que no soy rata de ciudad grande.
Auroras

Camille Stein dijo...

clones inmersos en un destino que ya no se plantean cambiar... clones que hablan para adentro, la única forma que les queda de contactar con su interior, cada lunes más agazapado

un beso, Isabel

Anónimo dijo...

Otro más que me encantó.
Los clones de un nuevo día.
La verdad es que si...

Nobska dijo...

Entre bostezos, pisotones y empujones, que forma tan desconcertante de empezar la semana en el transporte público y peor aun cuando esto se convierte en rutina. Espero que este lunes haya sido distinto para ti.
Un abrazo.