22 de septiembre de 2010

Árboles

Los árboles esperan la inminente caída de sus hojas, se despiden de las colonias de pájaros que antes los habitaban con sus trinos y se someten nuevamente a la fuerza del viento sobre sus ramas.

Líquenes y musgos, las pequeñas y profundas cicatrices con forma de corazón destacan aún más sobre sus troncos desprovistos de hojas.

Pacientes torres arbóreas que cambian de inquilinos, el tapizado de sus paredes y el color de su hogar; mas nunca su lugar.
No se mudan, se transforman...

Ralentizan sus expectativas, podan sus aires de grandeza y esperan…
El otoño les llega como un amor que, de improviso, cambia sus vidas…
Van mudando la tonalidad de su piel, esperando el letargo de los meses venideros.

No se quejan, no tienen prisa: saben que la vida tiene sus tiempos…
Debo aprender de los árboles…
Los amo tanto como se ama lo que se sabe que, algún día, se puede perder…


Imagen:pnewbery

8 comentarios:

Walden dijo...

Una maravillosa descripción del cambio y de lo que permanece, la esencia.
La foto es una maravilla.


Un beso.

Ligia dijo...

Debemos tomar ejemplo de los árboles, pues...
Abrazos

edmundo serna ruz dijo...

Hace un par de días cayó un viejo árbol y aún retumba como una albada, en este bosque viejo, que no vencido, lleno de árboles más vivos que nunca, pacientes, sin quejas y con inquilinos. Tu lo has dicho. Amemoslos y aprendamos de ellos, cuando toquen otoños, preparemos primaveras, mayos o septiembres, ¿qué más da?, si lo que importa es el ruido. Saludos casi otoñales.

Con tinta violeta dijo...

Y en esta época cercana al otoño nos recuerdan que todo es finito...menos la eternidad que nos espera. Bellísimas palabras, Isabel
Abrazos!!!

Fliscornio dijo...

Hola Isabel! Hermoso texto, lleno de poesía. Aquí desde el sur de américa los árboles comienzan a vestirse nuevamente, iniciando el ciclo una vez más. Un abrazo

El búho rojo dijo...

Tal vez por que sabemos que lo podemos perder, lo amamos tanto

Precioso texto y música...

Un beso

poca luz dijo...

...mi Querida Señora de las Mutuas Palabras. De la Bella Música...mi querida Isabel...cuánto te eché de menos...se que me creeras si te digo que estoy profundamente emocionada.
Soy nadaq, (en una isla) y vuelvo al ataque :)

Un fuerte abrazo, querida.

Isabel dijo...

Walden, me alegra leerte,amigo.Gracias por seguir ahí. Te deseo un feliz fin de semana. :-)

Ligia, son un ejemplo de lo más natural,amiga. ;-)
Un besote.

Edmundo,ellos,los árboles, nos preparan primaveras frondosas,veranos refrescantes, otoños coloristas, inviernos sonoros...¿qué más se les puede pedir?Hay que amarlos,sin duda.Un gran abrazo.

Paloma, nos recuerdan que todo cambia,que la vida siempre se renueva.Un beso amiga y gracias.

Norberto,cuánto me alegra saberte primaveral,qué envidia amigo.A ver si retomamos "las buenas costumbres" y nos ponemos en contacto,amigo.Es una alegría saber de ti siempre.Un fuerte abrazo y disfruta esa maravillosa estación que ha comenzado por allá...

Pablo, mi fiel amigo, siempre tan entrañable...Un beso enorme y mis mejores deseos para tu otoño,amigo.

Querida Bea,cuánto bueno por aquí,amiga.
Casi te di por perdida.Yo sí que te eché de menos, faltaban tus maneras y tu esencia...
Se te extrañaba,de verdad.Me encanta saberte de vuelta.La vida son ciclos,¿verdad?
Todos necesitamos nuestros tiempos...
Nos pondremos al día,ya verás...Un placer tu regreso. :-)

Besazos.....