No sabe mi boca a miel, ni al almíbar más exquisito que conozco.
No exhala mi aliento aromas de sándalo ni canela; no riegan mis palabras esencias de madreselva, ni mis labios se cubren de lavandas.
No puse ningún clavel en mi boca entreabierta, ni siquiera una rosa roja rozó mis comisuras.
Pero nada hay tan fragante como el amor que encierra mi silencio.
Que imagen tan sensual. Y el texto precioso. Como siempre. Me encanta tu arte. Gracias por compartirte.
ResponderEliminar!Qué decirte!
ResponderEliminarUn suspiro de fragancias. Qué grande y hermoso es ese amor que todo lo silencia para que el gran silencio hable.¡Mare meua!
...la foto del anterior post ...que primaveral!! ...
ResponderEliminar...cómo siempre un placer leerte.
Feliz domingo, linda!
Y es que el amor al desnudo es el amor más verdadero, posiblemente, sin añadir más, sin pintarlo de colores...AMOR...sólo eso!!!
ResponderEliminarUn besote grande
.. es que silencios así no necesitan cargarse ni todo lo que antes decías, ni de nada más.. :-)
ResponderEliminar.. besitos domingueros, Isabel..
Llegué por casualidad a tu blog y me ha encantado. Me gusta como escribes.
ResponderEliminarGracias por toda la suma de palabras importantes que me dejais cada día;no os imaginais todo lo que suponen para mí.
ResponderEliminarAbrazo de amplia cabida para todos.:-)