5 de septiembre de 2007

Un valle muy cercano...

No recuerdo cuando la conocí con exactitud, ese día que la vi por vez primera, sin embargo debió ser allá por el año 1978 ó 1979.

Cuando pretendo remitirme al comienzo de nuestra amistad me doy cuenta que ella ha sido, y sigue siendo “mi gran amiga del alma”.
Una va tejiendo relaciones más o menos importantes a lo largo de la vida; pero pocas logran ser algo importante en verdad y llegan a formar parte de nuestra propia esencia.

En realidad son muy pocas las personas que nos importan personal y sentimentalmente, pocas descubren el camino hacia nuestro verdadero lugar especial- nuestro yo- y además lo entienden y aceptan.
Reconozco que el mérito en este caso es mutuo, porque ambas trabajamos para que así fuese.

Hemos compartido casi toda nuestra vida, con todo lo que eso supone y conlleva; estamos aún aprendiendo a conocernos mejor porque el camino sigue y seguimos atentas cada día.
El respeto entre nosotras ha sido un presente silencioso y continuo que nos ha permitido sentirnos libres; tal vez por eso siempre he tenido la maravillosa sensación de sentirme tan bien con ella ,aun cuando no hayamos tenido la necesidad u ocasión de dialogar.A veces la presencia ya es suficiente dialogo.

Quiero y tengo la necesidad ahora de decirle a mi gran amiga, públicamente incluso, que mis días han sido, y son, mejores compartiéndolos con ella.
Que la quiero más de lo que estas palabras pueden expresar con sus limitaciones y que la vida, nos lleve por donde nos lleve, sigue dándonos la oportunidad de celebrar que nos hemos conocido y de compartir lo que estemos dispuestas a seguir compartiendo.

Aunque en ocasiones el sendero se ponga cuesta arriba tú sólo tienes que mirar al lado,amiga, porque estoy ahí y quiero seguir estando mientras me lo permitas.

Gracias,Maria del Valle;
gracias por seguir adelante tal y como eres.
Simplemente,porque así lo aprendimos, nuestra amistad no depende de cosas como el espacio y el tiempo...




7 comentarios:

Enrique Rojas Guzmán dijo...

Ese tipo de amigo es para conservarlo, por encima del bien y del mal.

poca luz dijo...

...y aquí estoy medio llorocita pensando en esa amistad tan linda y acordándome de mis amigazas del alma, sabiendolas tan lejos y tan conmigo.

Una fortuna que hay que saber cuidar por ser uno de los motivos que dan sentido a todo.

De nuevo, me siento feliz de verte.

....y otro abrazooooo...!!!

Anónimo dijo...

Amistades que son ciertas nadie las puede turbar...
Un abrazo.

Rodavlas dijo...

nuestra amistad no depende de cosas como el espacio y el tiempo...

Pero mientras perdure el recuerdo... siempre quedará amistad..

Saludos y enhorabuena por tu blog.

MªValle dijo...

Bueno, pues yo que estos días ando baja de ánimo y además con la lágrima fácil, pues ahora ya corre a su libre albedrío. Ya sé que estás ahí, y que seguiremos como hasta ahora o mejor. Yo también sigo aquí.
Un beso fuerte.
Joé que llorera. Mi hijo ha aprobado todo.

இலை Bohemia இலை dijo...

Hay amistades que valen su peso en oro...

Vine a traerte cariño y saluditos de mis loritos...

:o)

Maple dijo...

Isabel, como me ha tocado en lo personal esta nota tuya. Precisamente en la madrugada de hoy se ha marchado mi mejor amigo desde hace 11 años a vivir a Barcelona. Ojalá que apesar de la distancia, esta amistad se mantenga más allá de las limitaciones. Como siempre, que forma tan hermosa que tienes para expresar tus sentimientos. Te abrazo fuertemente.