8 de abril de 2008

Intemperie

A veces nadamos contracorriente, más agotados que de costumbre; nadie nos regala nada.

Hay días que la ternura llega a tiempo, como una orilla próxima,una mano inesperada; pero hoy llueve.

Tras los cristales mojados hay un mundo convulso, que no siempre podemos mirar desde el confortable interior; así permanecemos fuera, empapados y solos.
Mirando con tristeza ese empañado calor interior que desprenden otros corazones que nunca nos invitan a pasar…

Imagen:Daaram


9 comentarios:

LlunA dijo...

Una vida en la calle....haga frío o haga calor...
Dura vida a la intemperie, tantas historias tras esas caras...
un besote

Nobska dijo...

A veces hay corazones afligidos, siempre a la defensiva por miedo al tras-paso. Los dias de sol a donde se han ido!

El búho rojo dijo...

No dejes que el brillo de los ojos ajenos, nublen la luz de su alma...

ROSA dijo...

La lluvia limpia, renueva, refresca y alimenta la vida.
Mejor mirar al cielo.
Un beso hermanita

Noria dijo...

el primer paso es abrir el nuestro de par en par. dejar que entren mariposas, motitas de polvo, gotas de agua... algunas de ellas traen mensajes que son únicamente para nosotros.

un beso

N.

Meiga en Alaska dijo...

Un abrazo... desde lejos y virtual pero abrazo al fin y al cabo.

Anónimo dijo...

Sigo disfrutando con tus textos aunque a veces revelen una cierta desesperanza. Besos.

dijo...

tristeza.... y mucha....
mil besos amiga

almena dijo...

Por alguna razón, la lluvia tiene siempre algo de nostálgico...
Pero mirémosla de frente, vivifica, da vida, ¡es! vida.

:)

Beso