27 de abril de 2011

Lucidez


Dadme, al menos, un verso para aliviar mi frente dolorida de tantos golpes de incongruencia.
Supuran demasiadas palabras vacías por mis oídos, mientras resbalan sobre un pecho impermeable.

Siento una profunda hipocondría por querer hallar verdades; una necesaria enfermedad imaginaria y absurda…

Todo parece posible y, de repente, como en una espesa niebla, se diluyen las creencias.
La inocencia del cuerpo y del alma termina siendo sacrificada en la ardiente hoguera del conocimiento.

De este modo, la lucidez puede despertarme cada mañana preñada de causas y efectos…
Y cobrar todo otro sentido, porque el aire que respiro está lleno de razón…

No se debe vivir de otra manera; aunque la verdad resulte dolorosa…







Imagen: kolla85

15 de abril de 2011

Las personas que cuentan...

“La democracia es que las personas cuenten , no contar personas”

( Federico Mayor Zaragoza)



Nunca me he sentido identificada con ninguna estadística de ésas a las que nos tiene acostumbrados la política; especialmente ahora que se aproximan unas elecciones.

Cuanto más desean que me sienta como un número, más persona me siento; y las personas, si no recuerdo mal, sabemos pensar y elegir sin necesidad de mentiras…
Me niego a convertirme en una masa común y oscura, que solo sale a la luz cuando los votos suman y llevan a la victoria.

Quiero que piensen en mí el día después también; y el siguiente y el otro y el día después de después…

¿Por qué esa imperiosa necesidad de darnos explicaciones de lo útiles que van a ser nuestros votos antes de las lecciones y después, una vez conseguido el propósito del poder, dejamos de ser electorado para convertirnos en simples sufridores de su ineficacia, corrupción y nepotismo?

No quiero sentir vergüenza ajena mientras escucho las mentiras de unos y otros , como si los que oimos tales patrañas no tuviéramos nada que objetar ni decidir.
Señores, la única voz que hay que respetar es la de las personas que cuentan, y no votos precisamente… La que siempre se ha llamado la voz del pueblo y no la de los poderosos.
Si fuéramos conscientes de nuestro verdadero poder empezarían a ponerse muy nerviosos…
Por eso, de vez en cuando, nos “inoculan” una crisis y así, casi sin darnos cuenta, nos devuelven el miedo olvidado….

Imagen: La Kodorniz

8 de abril de 2011

Vive tu vida...

En más de una ocasión me he preguntado si es conveniente estar tan informados de lo que sucede a nuestro alrededor o del último acontecimiento acaecido en el último rincón del planeta; siempre se ha dicho que la información es poder, pero ¿ qué clase de poder?...
Otra cuestión bien distinta es si nos referimos a la información, llamémosle, “privilegiada”; ésa es bastante evidente y casi siempre suele tener sus ventajas, sobre la cuales no voy a hablaros ahora...
Pero creo que es importante reflexionar unos minutos sobre este asunto.

En la era de las comunicaciones avanzadas - con internet, redes sociales, emails, teléfonos móviles, tablets, wi-fi … - es difícil preguntarnos si merece la pena la sobreinformación, la saturación de datos y noticias a las que estamos expuestos cada día ;circunstancias, por otro lado, que nunca llegaron a estresar a nuestros abuelos…
Pienso que hemos llegado a un extremo peligroso; la comunicación ha dejado de ser un objetivo para acabar convirtiéndose en un problema, quizás en el mayor medio de desinformación a nuestro alcance.
Es difícil controlar lo que se cuece con tantos datos,sobre todo cuando los medios dejan de ser independientes, originando con ello una lucha a muerte por ofrecer informaciones interesadas ; la mayoría de las veces con fines demasiado evidentes o propagandistas.

Una primera reacción puede ser la falta de interés ante tanta contaminación en los medios, un rechazo radical a seguir siendo manipulados. Quizás ésa sea una de las razones por las que los blogs han experimentado tanto éxito; es una manera de buscar y compartir la realidad, nuestra información, y no otra, por medios propios…

Sin embargo, por suerte, aún nos quedan otras formas de asimilar e interpretar el mundo: desconectándonos del mundanal , o virtual, ruido y recordando que, en la era de la comunicación, la mejor información también puede ser aquella que nos transmiten las nubes, los vientos o las aves que nos sobrevuelan buscando, seguramente, un lugar mejor donde resguardarse…
Como, también, a mí me gustaría encontrar de vez en cuando…


Imagen: Havok25

6 de abril de 2011

Mundo

Demasiado hambre para compartir el maná…

Sé de un sitio para todos,

mas todos locos de atar…



Imagen: xaviertart